Historias que no se explican: Extraña visita y una cura milagrosa

Historias que no se explican: Extraña visita y una cura milagrosa

Por Gerardo Bessone. Especial para CodigoCBA.

Como es habitual  con este tipo de historias vamos a preservar la identidad de los protagonistas de esta narración.

Esto sucedió hace 35 años o más en una vivienda a unas tres cuadras de la plaza central de General Cabrera.

Hacía varios días que la mujer que habitaba la casa, de poco más de 70 años, enfermó pero no había un diagnóstico preciso, simplemente quedó postrada en la cama y se esperaba el peor desenlace. Incluso el padre Arnaldo Tosco, había ido a darle la unción de los enfermos.

Entre las hijas y la nuera se turnaban para acompañarla en las noches, donde dejaban encendido el velador al que tapaban un poco con un pañuelo, con la luz suficiente como para poder vigilar el estado de la enferma pero que a la vez no le molestara.

La casa se distribuía de la siguiente manera: entre la habitación antes mencionada y otra se encontraba el baño, y tenía acceso al resto de la casa por una puerta que daba al comedor y cruzando el mismo se llegaba a otra habitación.

Una noche en que estaba la nuera cuidando a la suegra, la hija que estaba durmiendo en la habitación que se encontraba al otro extremo del comedor, tiene una extraña visión que hasta el día de hoy recuerda y la estremece…

Estaba durmiendo en una cama que se encontraba junto a la pared y como entre sueños ve una mujer parada a su lado, con un pañuelo en la cabeza y vestida con ropas claras que la está mirando. En ese momento no sintió miedo ni nada, simplemente siguió durmiendo.

A la mañana siguiente cuando se levanta, la madre le pregunta qué hacía levantada a la noche… como en ningún momento lo había hecho, le resulta extraño que le pregunte eso. Entonces su madre le comenta…sí, ibas vestida con un camisón y un pañuelo en la cabeza y cruzaste hacia el baño y yo todavía te reté porque no quería que despertaras a la nona. Inmediatamente recuerda la imagen de la mujer que la estaba mirando y cae en la cuenta que era imposible que estuviera parada en el lado izquierdo de la cama ya que ahí estaba la pared…justamente una mujer vestida como la que vio su madre la noche anterior y que venía del lado de su dormitorio.

El estremecimiento que sintieron las dos en ese momento es inexplicable!!! Lo asombroso de todo esto, es que la enferma a los pocos días comienza a mejorar sin causa aparente y comienza a llevar una vida normal.

Nadie puede dar una respuesta cuando se pregunta quién podría haber sido… una amiga catequista llegó a decir que quizás era la Virgen por la vestimenta y el pañuelo en la cabeza, aunque no lo llevaba como el manto Mariano sino que atado hacia atrás. Un sacerdote amigo opinaba que podría tratarse de alguien bueno (¿un ángel quizás?) que los liberó de esa situación… 

Han pasado muchísimos años pero la imagen no se ha borrado de la memoria de la por entonces jovencita que dormía sola en esa habitación ni tampoco de la de su madre.

Usted que está leyendo de noche … No vio una extraña dama cruzando en la habitación de al lado